Es el hermano menor de Manuel, mi bisabuelo materno-paterno. Militar de profesión, fue el primer Luque que por parte de la familia llegó a Canarias, un 6 de diciembre de 1898. Desarrolla su carrera comenzando desde el voluntariado, aunque se licenció a los pocos años de iniciarla. Posteriormente regresará para servir en el cuerpo de la Guardia Civil, alcanzando en 1905, una vez que se retira, el grado de 2º Teniente de la escala gratuita.
En el huracán que asoló Cuba entre el 4 y el 5
de septiembre de 1888 y durante el incendio en el puerto de Santa Cruz de
Tenerife el 9 de marzo de 1901, tuvo destacadas intervenciones prestando
auxilio, siendo recompensada su conducta por escrito en su expediente militar,
y obsequiado por la Benemérita con un reloj de plata como reconocimiento a su
persona.
Sirvió en Granada y Jaén; como escribiente, en
las Comandancias de La Habana y Santa Clara (Cuba). Estuvo en Melilla durante
la denominada guerra de Margallo (1893-1894). Con posterioridad en las
Comandancias de Valencia, Castellón y Tarragona. A finales del 98 será
destinado a Canarias. En 1904 regresa a la península para prestar servicios en
su último destino: Teruel.
En 1904 le fue concedida, por la casa Elder Dempster y Cía,
la insignia de la medalla de plata de la Asamblea Suprema de la Cruz Roja en
recompensa por sus servicios. [1]
SUS
PRIMEROS AÑOS
Nace el 21
de marzo de 1866 en Pamplona (Navarra), uno de los destinos militares de su
padre. Es hijo del, por entonces,
teniente Antonio de Luque y Palma, natural de Granada y de la cubana Natividad
Díaz de Sotomayor, hermano de Manuel (bisabuelo materno-paterno) y de Antonio,
nacidos en La Habana (Cuba), así como de Caridad Luque y Planas, hija del 2º
matrimonio de su progenitor con Mª Ángeles Planas y Ferrer.
Fueron sus abuelos paternos Sebastián de
Luque, Sargento de la Compañía de Inválidos en La Alhambra de Granada, natural
de Montilla (Córdoba) y Mª Thomasa de Palma, nacida en la capital granadina.
Los maternos, los cubanos Andrés Mª del Rosario Díaz Pérez de Sancti-Spiritu y
Mª de la Caridad (Cleofás) de Sotomayor, nacida en Santa Clara.
En el mismo año de su nacimiento (1866) la
familia regresa a Cuba, estableciéndose probablemente en La Habana pues su
progenitor está destinado en el fuerte de “La Cabaña”, fortaleza de esa ciudad
caribeña.
Federico de Luque y Díaz contrajo nupcias; tiene
al menos dos hijos, un varón cuyo nombre desconozco y una hija, Natividad Luque, nacida en Santa Cruz de Tenerife en 1903, con el mismo nombre que el de su abuela,
nuestra tatarabuela Natividad Diaz de Sotomayor.
EL INGRESO
EN EL EJÉRCITO Y SUS DESTINOS: GRANADA Y JAÉN (1882-1884)
El 28 de marzo de 1882, a los 16 años de edad y siendo estudiante, Federico reside en
Málaga. Se alista voluntariamente, figura como soldado sin derecho a premio y lo hace por tiempo indefinido. En su
filiación se recoge que es hijo del Coronel retirado D. Antonio de Luque y
Palma.
Un mes más tarde se le asignan 50 Ptas., en
concepto de “primera puesta de vestuario”.
Asciende ese mismo año a Cabo 2º y se encuentra destinado en el Regimiento de Infantería de las Antillas núm. 44, que está en Granada.
El 29 de julio marcha destinado a Jaén con su compañía, regresando un mes
más tarde a Granada para ingresar, por muy corto espacio de tiempo, en la
Academia preparatoria de hijos de Oficiales del Distrito donde cursará
estudios. Dos meses más tarde, en noviembre de 1882, solicita voluntariamente
reingresar en el servicio activo, quedando en Granada de guarnición.
A finales de agosto de 1883 pasa al Batallón de Escribientes
y Ordenanzas, en calidad de supernumerario. Al disolverse éste a finales de
ese año, regresa a la 1ª Compañía del Regimiento de Infantería de las Antillas
núm. 44.
El 1 de febrero de 1884 y a voluntad propia, obtiene
su licencia absoluta después de 3 años, quedando “en libertad para restituirse al pueblo de su naturaleza o donde más le
convenga”, firmándose su cese en la ciudad de Granada. Esta licencia no le
eximía de la responsabilidad de quintas cuando le correspondiese.
EN LA
GUARDIA CIVIL DE CUBA: LAS COMANDANCIAS DE LA HABANA Y SANTA CLARA (1887-1893)
El 16 de abril de 1887 es Guardia Civil de 2º
clase agregado, procedente de la clase de licenciado del ejército, firmando
como voluntario un compromiso de servicio por espacio de 4 años con opción a
premios. Es destinado a la 1ª Compañía de la Comandancia
de La Habana.
En enero de 1888 pasa a la de Santa Clara para prestar
servicios en el puesto de San Juan de
Las Heras. Por disposición del Director General del cuerpo, el 9 de
noviembre se le hizo entrega de un reloj de plata en nombre de la Institución “por su valor, abnegación y noble
desprendimiento llevado a cabo con motivo del ciclón que pasó por esta
Comandancia del 4 al 5 de septiembre, anotándole tan importante servicio en
esta su filiación”.
Este suceso quedó registrado en los anales
meteorológicos mundiales como Huracán de categoría 3[2], siendo denominado "Faniqueto".
En Canarias, la prensa también recogió los desastres causados por este fenómeno [3][4].
En noviembre de ese año asciende a Cabo 1º y es destinado a la 2ª Compañía de la misma Comandancia de Santa Clara, donde continuará prestando servicios en el puesto de San Juan de Las Heras. El 20 de junio desempeña una plaza de Escribiente en la oficina de mando de la citada Comandancia.
En noviembre de ese año asciende a Cabo 1º y es destinado a la 2ª Compañía de la misma Comandancia de Santa Clara, donde continuará prestando servicios en el puesto de San Juan de Las Heras. El 20 de junio desempeña una plaza de Escribiente en la oficina de mando de la citada Comandancia.
En 1889
continúa en el mismo destino hasta el mes de octubre en el que, por permuta
con el compañero Francisco Santiago Losa, pasa a la 3ª Compañía de la
Comandancia de La Habana, desempeñando igual empleo de escribiente.
Por esas fechas se anuncia en el DOMG[5] la concesión a D. Federico Luque y Díaz, huérfano de las
primeras nupcias del comandante retirado, D. Antonio[6]las
dos pagas de toca a que tiene derecho por reglamento, estando dirigido a la
isla de Cuba.
El 23 de mayo de 1891 finaliza su compromiso con el ejército que firmara por cuatro
años, solicitando un reenganche por un año más sin derecho a premios. En
septiembre de ese año es expedientado por supuestas lesiones al paisano Augusto
Nulipo Torres, siendo el caso sobreseído.
En febrero de 1892 asciende a Cabo y
es destinado a la 2ª Compañía de la mencionada Comandancia de La Habana; en
mayo finaliza su compromiso y solicita nuevamente reengancharse por un año más.
Continuará como Escribiente en la Dirección General.
En febrero de 1893 está destacado en el puesto de Verada Nueva. El 5 de julio embarca para la isla de Pinos en cuyo
punto quedó mandando el puesto de Sta.
Fé hasta el 10 de agosto en el que permutó su plaza con el sargento Vicente
Pallarés Pradas, pasando al punto de Nueva
Gerona, en la isla de La Juventud.
De nuevo Federico solicita continuar prestando
servicios por un año. En junio disfruta de cinco días de permiso “para arreglar asuntos de familia”, en
La Habana. En septiembre se hace cargo del puesto de Quivicán (en la antigua provincia de La Habana) y unos días más tarde hizo entrega del mismo al Cabo 2º Timoteo
Brotons Navarro.
Al haber cumplido el tiempo reglamentario en
la isla de Cuba solicitó pasar a servir en los Tercios de la Península,
embarcando en el vapor-correo “Reina Mª Cristina” rumbo al puerto de Santander
al que llega el 3 de octubre.
Vapor-correo “Reina Mª
Cristina”
SUS
DESTINOS EN LA PENÍNSULA: MADRID, MELILLA, VALENCIA, CASTELLÓN Y TARRAGONA
(1893-1898)
Se traslada a Madrid donde prestará servicios en su Comandancia como Cabo
supernumerario hasta su clasificación y destino, siendo adscrito a la 2ª
Compañía; es destinado al puesto de la capital. El 11 de noviembre y dada la
urgencia requerida para destacar tropas a Melilla (guerra de Margallo),
emprendió la marcha a esa plaza del norte de África.
Permanecerá en su Comandancia hasta el 5 de
enero de 1894, estando a las órdenes
del Comandante General de la ciudad. Con mucha probabilidad allí se encontrará
con su hermano Manuel (bisabuelo) que por esas fechas es Capitán del Regimiento
de Infantería de África núm.1 y vocal del Círculo Militar de Melilla.
Como todos los participantes en ese conflicto,
“recibe las gracias del Excmo. Sr. General
en Jefe del Ejército de África en nombre de S,M, la Reina Regente del Reino y
dispuso la estampación de la presente nota por su abnegación y disciplina
durante las operaciones mantuvo incólume el honor de la bandera nacional que la
patria le confiara”[7].
A finales de abril pasa a la 10ª Compañía de
la Comandancia de Castellón en clase
de efectivo; en el mes de mayo, al finalizar su compromiso con el ejército,
solicitó nuevamente y de forma condicional, un reenganche por un año, el cual
le fue concedido por “buena conducta y
robustez”.
En 1895
recibe una cruz al merito militar con distintivo blanco, por estar
comprendido en el R.D de 16 de mayo de
1894 que recompensó, en unas determinadas proporciones y categorías, a diversos
participantes en la guerra de Melilla.[8]
Una vez más, en mayo solicita reengancharse
por otro año sin opción a premio, y en octubre es destinado como agregado a la Comandancia de Tarragona y el 1 de noviembre ya está prestando servicios, como comandante del
mismo, en el municipio de Ulldecona,
situado en la comarca catalana del Montsiá, en esa
provincia catalana.
En mayo de 1896 obtiene un nuevo
reenganche por dos años. Una nota en su expediente militar lo declara como “incluido en el sorteo del reemplazo de ese
año habiendo obtenido el número 818 y corresponderle servir en situación activa
en la península”.
Entre el 13 y el 26 de febrero de 1897 es enviado al Hospital de
Tarragona pues se encuentra enfermo. Dispondrá de unos días de permiso por
convalecencia que disfrutará en Málaga, donde reside su hermano Manuel. Una vez
reestablecido se incorpora al puesto de Hospitalet.
El 23 de enero de 1898 se traslada al punto de La
Selva. Desde allí solicita su pase a los Tercios de la isla de Cuba,
anotándose su instancia en el “cuaderno
de aspirantes a fin de que en su día y en concurrencia con los demás de su
clase pueda obtener el pase que solicita”.
Como en años precedentes, en mayo se
reengancha; en esta ocasión por espacio de 4 años, finalizando este nuevo
compromiso en 1902. A finales de octubre de 1898 causa baja en el puesto de La
Selva
EN EL
PUERTO DE SANTA CRUZ DE TENERIFE (1898-1904)
Federico Luque y Díaz desembarca en Santa Cruz de Tenerife el 6 de
diciembre de 1898, siendo destinado a la 1ª
Compañía de la Comandancia de Canarias y prestará sus servicios de escribiente en el
puerto y los muelles.
Puerto de Santa Cruz
de Tenerife. Autor: Maximilian Lohr. 1892. FEDAC
El 28 de septiembre de 1899 se resuelve un
expediente instruido desde la Comandancia de Tarragona cuando el año anterior
se fracturara el codo del brazo derecho, en averiguación de sus causas y si
éstas eran merecedoras de recompensa, concluyendo negativamente al romperse
accidentalmente.
El 2 de noviembre de ese año se le otorga el
distintivo de un galón por llevar más de 12 años de servicio.
En julio de 1900 es agregado a la Sección Montada de la Comandancia y en
octubre pasó nuevamente a la 1ª Compañía como efectivo.
El 9 de marzo de 1901 tiene lugar un pavoroso incendio en el puerto de Santa Cruz de
Tenerife donde Federico Luque y Díaz tiene una destacada intervención en su
extinción y que quedó descrita en otra entrada del blog cuyo enlace facilitamos
seguidamente.
El 6 de abril recibió las gracias del Excmo.
Sr. Director del Cuerpo por su distinguido comportamiento, hecho que quedó registrado en su expediente personal.
En enero de 1902, un hijo de Federico encontró “antier” noche una sortija de oro en
la C/S. Francisco, según publicaba la prensa local del día 18.[9]
En abril de 1902 se le concede el cómputo de
meses prestados entre 1882 y 1884 en el Regimiento Antillas, Núm. 44, anterior
a su incorporación a quintas (cuando había cumplido 16 años).[10]
En febrero de 1903 fue encartado por aparecer
entre los que había aceptado dos botellas de Jerez de otro guardia civil,
siendo absuelto por no ser el hecho punible puesto que el obsequio no fue objeto
de ninguna complacencia ni servicios prestados.
En la primavera de 1903 se publica su ascenso a
Sargento (16/03/1903), siendo destinado a Jaén, aunque continuará prestando servicios en Canarias. [11][12]
En mayo, y a las órdenes del Jefe de Línea Sr. Egea, Federico
Luque descubre y pone a disposición de la autoridad competente a cuatro sujetos
que venían cometiendo robos de toda clase en efectos de marinería, siendo
agradecido por el Excmo. Sr. Director General del Cuerpo y recompensado por
escrito en su expediente. Este hecho ha sido localizado en la prensa local de
la época y que reproducimos a continuación.[13]
En junio de 1903 se publica un nuevo
reenganche (por espacio de 6 años a cumplir, de dos en dos) y la concesión de su
continuación en el cuerpo de la Benemérita.[14]
Asimismo se le concede autorización para lucir
en su uniforme la medalla conmemorativa de la jura de bandera de S.M. Alfonso
XIII.
En noviembre celebra un banquete que ofrece a sus
amigos, jefes, oficiales, clases y tropa del cuerpo, con motivo del nacimiento
de su hija Natividad Luque.[15]
En abril de 1904 se le abonan 58
pesetas por la inutilización de las prendas del vestuario en el incendio
declarado en el muelle de Santa Cruz de Tenerife (09/03/1901)[16].
Un mes más tarde, se edita en la prensa, la
misma noticia anterior.[17]
Y la de
la concesión, por parte de la Casa Elder Dempster Y Cía[18]. de la Insignia de la
Medalla de plata de la Asamblea Suprema de la Cruz Roja al Sargento de la
Guardia Civil, D. Federico Luque Díaz, por los grandes servicios prestados.[19]
SU
ÚLTIMO DESTINO Y RETIRO: TERUEL (1904-1905)
A finales de 1904 parte para Teruel siendo
destinado a la 5ª Compañía de su Comandancia para mandar el punto de Orihuela. Se incorporará después de
disfrutar de licencia. En junio y al llevar más de 20 años efectivos de
servicio, solicita su retiro, residiendo desde entonces en el Camino de
Churriana, 64 de la capital malagueña.
En enero de 1906, y a petición propia, se le concede el grado de 2º Teniente de
la Escala de Reserva Gratuita.[21]
Y en mayo de ese mismo año, la licencia por
tiempo indeterminado para la isla de Cuba.[22]
[1] “El
Tiempo”, diario de asuntos generales e información, defensor de los intereses
del país, pág.1 de 12 de junio de 1904.
[2] Orlando Lázaro Córdova García, Armado de la Cruz Mursuli Hernández, Aysbel
Denis Ruiz y Ania Valdés Calderón. “Climatología de los ciclones tropicales en
la provincia de Ciego de Ávila (Cuba) en el período 1851-2005” [en
linea]< http://goo.gl/S2lv64>
[13/04/2015]
[3] “Las Canarias”. Pág. 2 de 18/09/1888 [en línea] <
http://goo.gl/jrBqIr> [13/04/2015]
[4] “Las Canarias”. Pág. 2 de 23/09/1888 [en línea] <
http://goo.gl/avahEU> [13/04/2015]
[5] DOMG de 29/10/1890
[6] Fallecido en 1889
[7] DOMG Num. 67 de 29 de marzo de 1894 < http://goo.gl/RL6I8V> [en línea]
[9] “La
Opinión” (Santa Cruz de Tenerife), Pág. 2, de 18/01/1902.
[10] DOMG Núm.
75. Pág 67 de 06/04/1902. [en línea] < http://goo.gl/WqHpXy>
[13/04/2015]
[11] “Diario de Tenerife”. Página 2, de 23/03/1903.
[12] “Diario de Tenerife. Página 2, de
20/05/1903.
[13] “La Opinión” Página:2 30/05/1903 [en línea] http://goo.gl/u35CC7 [13/04/2015]
[14] “Unión
Conservadora” de Santa Cruz de Tenerife, Pág. 2, de 04/06/1903.
[15] “Diario de Tenerife”. Página 2, de 24/11/1903.
[16] DOMG de
15/04/1904.
[17]” El Tiempo”, Página: 2” de
06/06/1904.
[18] Compañía naviera británica que
operaba en el puerto de Santa Cruz de Tenerife.
[19] “El
Tiempo”, Pág.1, de 12/06/1904.
No hay comentarios:
Publicar un comentario